domingo, 29 de mayo de 2011

El Chileno, el Matador, o simplemente...



Salas. La rompió en el equipazo de los 90s. José Marcelo Salas nació un 24 de diciembre de 1974 en Temuco, Chile. Debutó el 10 de abril de 1993 para la U de Chile, en la Copa de Chile. Al año siguiente mejoró muchisimo, marcando 41 goles en 46 partidos, ganandose el apodo de Matador, por una canción de los Fabulosos Cadillacs muy famosa por esa epoca. Desde 1993 hasta junio de 1996 Salas jugó 126 partidos y metió 76 goles, dando un promedio de 0,60 de gol por partido, una cifra más que aceptable. Ganó el Campeonato Nacional de 1994, después de 25 años de sequia, y el de 1995. En junio de 1996, boca y River se interesaron por él, pero fue River el que más plata puso (2 millones de dolares) y se lo llevo. En su segundo partido, Salas convirtió su primer gol en River. Y fue nada menos que en el Superclásico del futbol argentino. Sí, su primer gol fue a boca. Muy pocas veces fue al banco: pero siempre que entraba, cumplía. Siguió con sus goles a Platense, San Lorenzo, 2 a Ferro. Y siguió los goles a Velez. Entró, y metió dos goles, provocando la victoria de River por 3-0 (el último fue del Diablo Monserrat). No pudo ganar la Intercontinental, pero si la Supercopa, de la cual en la final convirtió los dos goles del triunfo (el total de goles durante la copa fue de 6 goles, convirtiendose en el goleador del torneo). En junio del 97 se le dio el ansiado pase a Europa: primero Lazio, luego Juventus. Marcelo volvió para el 2003, con el ingeniero Pellegrini como DT. Salas no era titular, pero cuando entraba metía un par de goles. Se fue mal del club en 2005, cuando Astrada le dijo que no lo iba a tener en cuenta. Volvió a la U, donde allí se retiró en 2009. Él y todo River festejaba cada gol suyo, ese festejo del dedo arriba la rodilla sobre el verde cesped del Monumental. Todos festejaban. Hoy, River no festeja, sufre. Y Salas debe estar sufriendo, como todos los hinchas de River.

1 comentario:

  1. "Un chileno nunca triunfo en Argentina" dijo Bilardo.
    Afortunadamente, se equivoco, y "EL MATADOR" dejo el chiquero, y se fue para RIVER, donde hizo muchos goles, gano torneos, y quedo en el recuerdo de nuestro pueblo River Platense.
    Su vuelta, estuvo plagada de lesiones y no se retiro como debia y merecia un crack de semejante valia.
    Todavia retumba en mis oidos el : "SALAS gol SALAS gol gol gol gooooooooollllllll.....
    Grande Marcelito, nunca te olvidaremos...

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